Si tengo espasmos al dormir, ¿debo ir al médico?
Los espasmos al dormir ocurren con más frecuencia de la que crees. Al menos un 70% de las personas en el mundo experimentan este tipo de sacudidas nocturnas.
En el momento en que suceden, los espasmos al dormir pueden despertar tanto a quien lo padece como a su pareja o compañero(a) de habitación. Por lo general, suele haber un sueño intenso o alucinación, previos a este tipo de reacciones. Lo más usual es tener una sensación de caer por las escaleras o al vacío.
¿Qué son los espasmos mioclónicos?
Los espasmos mioclónicos o sacudidas hípnicas son un fenómeno fisiológico muy común cuando nos estamos quedando dormidos o al poco tiempo de entrar al universo de Morfeo. Son estímulos nerviosos de muy poca duración que se escapan de nuestro cerebro hacia las extremidades o el torso haciendo que tiemblen o se sacudan repentinamente de forma localizada o generalizada. Éstos ocurren cuando estamos en una especie de limbo entre vigilia y el sueño profundo, siendo generalmente inofensivos. Los espasmos durante el sueño pueden comenzar a presentarse en la infancia o en la adultez. A pesar de que este movimiento inesperado, involuntario y breve puede despertar a quien lo siente, no se le considera un trastorno del sueño como tal, con la excepción de que se manifieste de manera muy frecuente, pudiendo desencadenar una dificultad persistente para conciliar o mantener el sueño, provocando un cansancio excesivo durante el transcurso del día.
Un estudio realizado en la Universidad de Colorado (EE. UU.) propone que estos espasmos al dormir sean un reflejo heredado de nuestros antecesores producto de una interpretación inadecuada que hace el cerebro cuando se produce la relajación muscular al comienzo del sueño. También, algunas investigaciones sostienen que estos espasmos al dormir son vestigios de un sistema de defensa que se mantiene alerta durante el sueño y envía señales eléctricas a nuestras extremidades para responder a estímulos externos.
Ni dormidos dejamos de estar en movimiento
Durante el sueño, existen 2 tipos de movimientos involuntarios que se escapan de nuestro cerebro y tienen diferentes modos de operar y presentarse. Se mencionan a continuación:
- El movimiento mioclónico: los espasmos mioclónicos parecen ser una señal de que el área motora en nuestro cerebro aún puede ejercer control sobre el cuerpo mientras vamos entregándonos a la relajación muscular.
- El movimiento ocular rápido: es la parte del sueño en la cual la mayor parte de las personas experimentan sueños vívidos. Hay distintas hipótesis que intentan explicar los movimientos durante esta fase del sueño. Una de éstas sugiere que este tipo de movimiento ocurre para producir y extender la lágrima sobre la superficie del ojo y evitar la resequedad, y al hacerlo, también se favorece la ensoñación.
¿Cómo podemos evitar los espasmos al dormir?
Te dejamos una serie de recomendaciones para evitar estos espasmos al dormir:
- Evitar el consumo excesivo de café o bebidas con cafeína, así como de tabaco y otras sustancias estimulantes o energéticas.
- Realizar actividad física moderada regularmente sin que llegue a ser extenuante.
- Mantener horarios regulares de sueño que garanticen el descanso para prevenir un sueño insuficiente.
- Procurar llevar una alimentación balanceada.
- Incorporar estrategias para manejo del estrés como ejercicios de respiración o de relajación, en especial, antes de ir a la cama.
¿Cuándo hacemos un estudio del sueño en estos casos?
Resulta indispensable el diagnóstico mediante estudio del sueño en los siguientes casos:
- Cuando estos espasmos al dormir sucedan de manera generalizada, con mucha intensidad y/o frecuencia que dificulten el inicio del sueño o lo interrumpan, se aconseja consultar para diferenciarlo de otros trastornos del movimiento durante el sueño.
- Aunque en niños la mioclonía podría ocurrir por sí sola, estos espasmos al dormir pueden ser causados por diversos trastornos del sueño o por epilepsia.
- Si se acompaña de un cuadro clínico compatible con incomodidad, nerviosismo de piernas, brazos o en todo el cuerpo, que produce insomnio o despierta del sueño, provocando que haya somnolencia en el día, nos puede orientar a un Síndrome de piernas inquietas (Sindrome de Piernas Inquietas, Enfermedad Wills-Ekbom),
siendo esta una patología que amerita una importante atención y tratamiento.
Como se ha mencionado con anterioridad, estas formas de movimientos mioclónicos suelen darse en personas con buen estado de salud, y en raras ocasiones, repercute negativamente en la misma. No obstante, otros perfiles de mioclonías pueden deberse a una afectación del sistema nervioso, como la epilepsia o la reacción ante el uso de algún medicamento. Ahora bien, es crucial
conocer la causa esencial subyacente, pues será la brújula que nos indique hacia qué dirección tomar a la hora de elegir la mejor intervención para el control de los síntomas de la mioclonía, y poder ayudarte a mejorar tu calidad de sueño, que de ello depende mantener un buen estado de salud.